Hace una semana mi hija empezo a ir a clases nivel preescolar, y me acorde de mafalda en su primer dia, no lloro ni quiso huir ni nada, le fascino ir, habia mucho que hacer e incluso tuvo la oportunidad de conocer a su maestra y la escuela dias antes de entrar, asi que solo estaba esperando el momento, ahora ya empezo con tareas, pequeñas actividades, dibujar, rellenar, seguir lineas, y por supuesto aprender idiomas jejeje (me sigue cuando practico kanas), tiene buen oido, ella y yo descubrimos que podemos oir hasta 30 khz, y a ambos nos molesta el ruido del cañon de electrones de la television, y como buena hija de gente generacion X, le gusta el olor de crayones recien salidos de su caja, lastima que el plastico cristal con que forramos sus libros y cuadernos ya no contiene esos quimicos de olor dulce que nos agradaba cuando eramos niños.
Hoy le toco hacer tarea, y no porque ya empezaran a dejarle, si no porque no termino actividades en horas de clase y ni modo, no salio hasta que termino sus deberes.
1 comentario:
:) No sé por qué cuando te conocí sabía que ibas a ser el papá que sí se queda a supervisar las tareas de sus hijos y no se harta de eso, :) Michelle y yo tenemos suerte... :')
Publicar un comentario